La duración de todo el procedimiento es de aproximadamente 15 minutos, aunque la aplicación de láser es solo de algunos Segundos por ojo, y es completamente ambulatorio.

Generalmente si, pero depende de su médico cual es la mejor alternativa para usted.

No es dolorosa, pero si es molesta debido a la sensación de manipulación del ojo. Usted podrá sentir sensación de presión sobre su ojo, pérdida transitoria de la visión (totalmente normal), y leves molestias durante el procedimiento.

Le instalarán un separador de párpados que evitará que cierre los párpados durante su cirugía.

El equipo láser cuenta con un sistema de seguimiento del ojo, que ante cualquier movimiento brusco, se detiene automáticamente, eliminando el riesgo de realizar una corrección errónea.

La anestesia es solo local en gotas, no se utiliza anestésico inyectable. Además se administra un relajante oral, suave para disminuir la ansiedad.

Lo habitual es que sea muy rápido, solo dentro de algunos días. Sin embargo es variable para cada paciente. Su visión se irá estabilizando con el paso de los días hasta lograr el resultado esperado dentro de las siguientes 2 a 4 semanas generalmente.

Usted quedará con un protector de policarbonato transparente o lentes de sol. Su Médico le indicará cuando retirarlo.  NO se utilizan parches luego de la cirugía.

Si, se utilizan antibióticos, antiinflamatorios y lubricantes en gotas de acuerdo a la indicación de su oftalmólogo.

Las molestias son variables. Pueden ir desde ninguna molestia, hasta sensación de arenilla, mucho lagrimeo y molestia a la luz, los cuales pueden variar de intensidad y durar 24 horas aproximadamente siendo siempre tolerables.

Si la recuperación es normal, no existe impedimento para usar dispositivos electrónicos de acuerdo a tolerancia. Esto no interfiere en la recuperación post quirúrgica.

Una vez que se consiga la vision requerida para hacerlo. Lo que toma entre 1 y 3 dias de forma regular.

Normalmente se indica un periodo variable de abstinencia de cigarrillo y alcohol, todo dependiendo de su recuperación e indicación de su oftalmólogo.

Habitualmente dos semanas posteriores a la intervención.

Si su problema visual se encuentra estable (sin grandes cambios en los últimos años), en la gran mayoría de pacientes, la corrección óptica es permanente.